
En Colombia, las pequeñas y medianas empresas (PYMEs) representan el 99,5 % del tejido empresarial y generan cerca del 65 % del empleo nacional. Sin embargo, su crecimiento sostenible es una asignatura pendiente: solo una de cada tres PYMEs sobrevive más de cinco años
1. Supervivencia empresarial: un desafío persistente
Según Confecámaras, con datos del Registro Único Empresarial y Social, de las 296.896 unidades productivas creadas en 2017, apenas 98.696 continuaban operando en 2022, lo que equivale a una tasa de supervivencia del 33,5 % a cinco años
El análisis por tamaño de empresa indica que:
- Microempresas: supervivencia del 33,4 %
- Pequeñas: 60,9 %
- Medianas: 73,7 %
- Grandes: 85,7 %
Esto demuestra que el tamaño y estructura jurídica influyen decisivamente en la durabilidad de los negocios.
2. Un entorno económico con señales mixtas
La economía colombiana muestra signos de recuperación:
- En el primer trimestre de 2025, el PIB creció 2,7 % interanual, impulsado por sectores artísticos, agropecuarios y comercio.
- En mayo de 2025, la actividad económica aumentó 2,81 % interanual gracias a los servicios públicos, financieros y administración pública.
- Además, en abril de 2025, el desempleo urbano cayó al 8,7 %, y el nacional al 8,8 %, mostrando una mejora frente al año anterior.
Este marco económico favorable podría crear oportunidades para las PYMEs si se gestionan adecuadamente.
3. Creatividad, tecnología y liderazgo joven
Un informe de Alegra.com revela que entre enero y mayo de 2025, el número de PYMEs creció un 11,4 %, destacando que casi el 60 % están lideradas por mujeres y el 70 % por personas menores de 45 años.
Además, el uso de tecnología avanza rápidamente: el 66 % de las PYMEs ya adopta herramientas de inteligencia artificial, reduciendo hasta un 50 % del trabajo operativo.
Retos clave para las PYMEs en Colombia
- Elevada tasa de cierre temprano: Muchas empresas no logran estructurar una base sólida, lo que implica un gran reto en su planificación financiera y gestión de recursos.
- Alta carga normativa y costos operativos: Los emprendedores enfrentan impuestos múltiples, cargas parafiscales y largos tiempos de pago, lo que exige contar con una buena asesoría y consultoría empresarial especializada.
- Dificultades en captación de clientes: Aunque el 83 % de los emprendedores usan redes sociales, el 51 % reconoce dificultades para convertir seguidores en clientes, debido a limitaciones de tiempo y creatividad.
- Acceso limitado al crédito y capital humano: Según Confecámaras, factores como acceso a mercados, capital y clústeres productivos son determinantes para la supervivencia.
Claves para impulsar el crecimiento y la permanencia
- Consultoría empresarial estratégica: Un acompañamiento experto puede fortalecer la estructura organizacional y ayudar a establecer procesos, optimizar recursos y diseñar rutas de crecimiento.
- Planificación financiera rigurosa: Establecer presupuestos claros, proyecciones sólidas y mecanismos de contingencia mejora la capacidad de resistir fluctuaciones del mercado.
- Asesoría jurídica y tributaria especializada: Reducir el impacto de impuestos, parafiscales y normatividad mediante una asesoría adecuada es vital para la sostenibilidad.
- Adopción tecnológica y marketing digital: Integrar herramientas digitales, automatización e IA puede facilitar la eficiencia operativa, liberar recursos y optimizar ventas.
- Acceso a redes y capital: Participar en clústeres, buscar capital ángel o fondos de crecimiento e integrarse a redes empresariales puede crear ventajas competitivas clave.
Conclusión
Las PYMEs en Colombia son el corazón de la economía, pero enfrentan un entorno lleno de retos: supervivencia baja, cargas administrativas, competencia desigual y dificultades para escalar. Aun así, el liderazgo femenino y joven, el impulso de tecnologías como IA, y el dinamismo económico reciente brindan oportunidades valiosas.
La clave está en fortalecer la consultoría empresarial, reforzar la planificación financiera y contar con una asesoría estratégica y adaptada al contexto colombiano. Solo así se podrá transformar esa chispa emprendedora en empresas resistentes, rentables y con capacidad de crecimiento sostenido.